El pasado viernes 7 de noviembre, un cazador abandonaba a esta perra de 12 años en las instalaciones del Albergue Valle Colino de Tenerife, en tal estado de maltrato y dejadez que su caso está conmocionando a la sociedad.
Santa, que así ha sido llamada la podenca en el albergue, se encontraba agonizando. Padece una grave infección producida por no haber recibido atención veterinaria ni haber ingerido alimentos en más de dos semanas.
Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que gestiona el Albergue, dijo que la perra sufre una infección "muy grave" en la mandíbula. Según detalló Naranjo, el responsable se presentó para entregar a su perra "como si nada" asegurando que "se había puesto así de un día para el otro".
El caso de Santa pone de manifiesto una vez más la cruel realidad de las otras víctimas de la caza: los perros.
Foto: Albergue Valle Colino
© All Rights Reserved
El pasado viernes 7 de noviembre, un cazador abandonaba a esta perra de 12 años en las instalaciones del Albergue Valle Colino de Tenerife, en tal estado de maltrato y dejadez que su caso está conmocionando a la sociedad.
Santa, que así ha sido llamada la podenca en el albergue, se encontraba agonizando. Padece una grave infección producida por no haber recibido atención veterinaria ni haber ingerido alimentos en más de dos semanas.
Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que gestiona el Albergue, dijo que la perra sufre una infección "muy grave" en la mandíbula. Según detalló Naranjo, el responsable se presentó para entregar a su perra "como si nada" asegurando que "se había puesto así de un día para el otro".
El caso de Santa pone de manifiesto una vez más la cruel realidad de las otras víctimas de la caza: los perros.
Foto: Albergue Valle Colino
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El pasado viernes 7 de noviembre, un cazador abandonaba a esta perra de 12 años en las instalaciones del Albergue Valle Colino de Tenerife, en tal estado de maltrato y dejadez que su caso está conmocionando a la sociedad.
Santa, que así ha sido llamada la podenca en el albergue, se encontraba agonizando. Padece una grave infección producida por no haber recibido atención veterinaria ni haber ingerido alimentos en más de dos semanas.
Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que gestiona el Albergue, dijo que la perra sufre una infección "muy grave" en la mandíbula. Según detalló Naranjo, el responsable se presentó para entregar a su perra "como si nada" asegurando que "se había puesto así de un día para el otro".
El caso de Santa pone de manifiesto una vez más la cruel realidad de las otras víctimas de la caza: los perros.
Foto: Albergue Valle Colino
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El pasado viernes 7 de noviembre, un cazador abandonaba a esta perra de 12 años en las instalaciones del Albergue Valle Colino de Tenerife, en tal estado de maltrato y dejadez que su caso está conmocionando a la sociedad.
Santa, que así ha sido llamada la podenca en el albergue, se encontraba agonizando. Padece una grave infección producida por no haber recibido atención veterinaria ni haber ingerido alimentos en más de dos semanas.
Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que gestiona el Albergue, dijo que la perra sufre una infección "muy grave" en la mandíbula. Según detalló Naranjo, el responsable se presentó para entregar a su perra "como si nada" asegurando que "se había puesto así de un día para el otro".
El caso de Santa pone de manifiesto una vez más la cruel realidad de las otras víctimas de la caza: los perros.
Foto: Albergue Valle Colino
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El pasado viernes 7 de noviembre, un cazador abandonaba a esta perra de 12 años en las instalaciones del Albergue Valle Colino de Tenerife, en tal estado de maltrato y dejadez que su caso está conmocionando a la sociedad.
Santa, que así ha sido llamada la podenca en el albergue, se encontraba agonizando. Padece una grave infección producida por no haber recibido atención veterinaria ni haber ingerido alimentos en más de dos semanas.
Adriana Naranjo, presidenta de la Federación Canaria de Asociaciones Protectoras de Animales y Plantas (Fecapap), que gestiona el Albergue, dijo que la perra sufre una infección "muy grave" en la mandíbula. Según detalló Naranjo, el responsable se presentó para entregar a su perra "como si nada" asegurando que "se había puesto así de un día para el otro".
El caso de Santa pone de manifiesto una vez más la cruel realidad de las otras víctimas de la caza: los perros.
Foto: Albergue Valle Colino
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