Souvenirs d'une famille haïtienne es una pequeña retribución a la familia haitiana que me acogió mientras aprendía antropología. Dicen que la paradoja del antropólogo comienza cuando se confunde con quienes comparte por tanto tiempo, lo que en consecuencia culminaría cualquier intención de mi ejercicio etnográfico. Pero esto no fue impedimento, la amistad superó toda la pasión que tengo por la profesión. Olvidé aquellos días cuando hacía preguntas y escuchaba atento para sólo vivir dentro de esa pequeña Haití.
Pronto me percaté que ese padre retratado era también el mío, que sus hijos eran mis hermanos y que su esposa era mi segunda madre. En ese rodeo, donde me convertía en hijo y me distanciaba de la antropología, mi cariño por esa familia se plasma en estas imágenes que pretenden inmortalizar el recuerdo que tengo de ellos.
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